En el informe “Proteger la Salud de los Océanos” realizado por una investigadora de la organización ecologista Worldwatch Institute, Anne Platt McGinn, se advierte sobre el peligro que atraviesan los océanos del mundo, si los gobiernos, las industrias y las comunidades no dedican más recursos y más energía para protegerlos. En este sentido, Mc Ginn señala que ” la mayoría de los cardúmenes están superexplotados y los mares son más cálidos hoy y están más contaminados que nunca”. Además recuerda que “más de la mitad de las costas del mundo están amenazadas por el desarrollo intensivo, la degradación de las tierras y la contaminación. La ambientalista sostiene que “las especies de algas venenosas casi se triplicaron desde 1984, lo que incrementó la muerte de los peces, el cierre de playas y las pérdiddas económicas”, aclarando que “desde la bahía de Tolo en Hong Kong hasta el Golfo de México, el crecimiento de este tipo de algas está vinculado a la creciente cantidad de nitrógeno y fósforo de las zonas costeras, en gran medida debido a las aguas servidas y los desechos agrícolas, ricos en nutrientes”. En el informe, se destaca también que la alta temperatura de los mares provocó la destrucción masiva de los arrecifes de corales, conocidos como las “selvas tropicales del mar” por su gran biodiversidad, desde la región del Caribe hasta el Océano Indico. El fenómeno de El Niño y el recalentamiento global del planeta produjeron las altas temperaturas, lo que trajo aparejada la enfermedad “blanqueo coral”, provocando la muerte del coral. La contaminación por cianuro, que se utiliza para aturdir y capturar a los peces tropicales, también amenaza a los arrecifes. Por último, McGinn, señala que “debemos dedicar muchos más recursos para proteger los océanos”, recomendando como ayuda para conservar los mismos, gravar en 0,1 por ciento las actividades industriales y recreativas realizadas en los océanos. Esta cifra generaría 500 millones de dólares por año, cifra más de cinco veces superior a los presupuestos anuales de dos instituciones protectoras de los océanos como la Organización Marítima Internacional y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación.
Fuentes: FUNAM (Córdoba);El Litoral (Santa Fe), abril de 1999.